Naranjas recién recogidas del árbol y sin tratamientos para su maduración, coloración ni conservación. Las naranjas maduran en el árbol y se recogen en su momento idóneo de maduración, por lo que la cantidad de zumo de cada naranja es muy superior a las que puedes encontrar en los supermercados. Se trata de las mismas naranjas que las de mesa, pero con un tamaño más pequeño o una piel menos bonita.